Contactar con las empresas es un paso esencial en tu búsqueda activa de empleo. Hay que afinar muy bien la puntería para que tu envío llegue al departamento oportuno y a la persona correcta; para que tu comunicación sea eficiente y eficaz
En este artículo te ofrecemos cinco sencillos consejos para saber dirigirte a las empresas, enviar tu candidatura, dar a conocer tu talento y posicionarte como profesional.
Te llevará más tiempo, pero será más eficaz que un envío masivo de currículos
Busca documentación sobre la empresa o entidad
En más de una ocasión hemos oído decir: “Me he cansado de enviar mi currículum, porque nadie me contesta ni me llama para una entrevista”.
Uno de los primeros problemas es realizar un envío indiscriminado de currículos. No tiene sentido que una persona que se dedica a cuidado de personas mayores, envíe su currículum a una empresa de transporte; o que un profesional de forestales envíe su candidatura a un atelier. Podrá hacerlo, pero no será eficaz.
El primer paso es conocer bien la empresa o la entidad con la que quieres contactar. Entra en su web, busca documentación sobre su trayectoria, sus proyectos e iniciativas; e incluso sobre su departamento de Recursos Humanos o las ofertas de trabajo que publica.
Contacto directo
“No encuentro el correo de Recursos Humanos. Lo envío a este que aparece en la web y arreando”. Es otro de los errores habituales: envíos masivos de currículos a un mail de contacto general. Igualmente, puede hacerse, pero no es lo más eficaz.
En la investigación de la empresa o de la entidad, hay que consultar también por el protocolo establecido para enviar el currículum o una autocandidatura. Si no viene detallado en la web; llama a un teléfono de contacto o escribe un correo electrónico. De esta manera, sabrás que tu información llega a la persona concreta de forma directa y que no se pierde en un hilo de correos entre diferentes departamentos.
Recuerda dirigirte correctamente a la persona de RRHH, explicando que tienes interés en la oferta de trabajo y por qué. Más de una vez los emails incluyen una sola frase: “Busco trabajo” y nada más. Ni un “Buenos días” ni una breve presentación. Con ese mensaje lo único que lograrás es no tener respuesta y, lo peor de todo, no lograr el trabajo.
Currículum actualizado y carta de presentación
No puedes tener un único currículum para todas las ofertas de empleo. Actualiza tu CV y adáptalo a cada una de las ofertas o candidaturas que te presentas. De esta manera, no te presentas como un profesional cualquiera del sector; sino como profesional para esa empresa, con los valores y ventajas que, con humildad, puedes aportar para sus proyectos.
Si además, envías también una carta de presentación explicando de forma detallada todos estos puntos, la persona que lo recibe tendrá una información mucho más completa y actualizada para su selección de personal.
Ojo con las faltas de ortografía
Antes de enviar, revisa los documentos y asegúrate de que no hay faltas de ortografía. Dedica tiempo a esta parte y evita errores innecesarios.
Parece un detalle insignificante, pero tiene su importancia. Piensa en la interpretación que puede hacer la persona que lo recibe. Puede atribuir las faltas de ortografía a falta de conocimiento o escaso nivel formativo; pero también puede pensar que no cuidas los detalles en tu trabajo; o que en realidad no te interesa mucho el puesto porque lo has enviado rápidamente y no te has molestado en corregir.
Seguimiento posterior
No basta con enviar el currículum. Hay que monitorizar sus envíos. Te recomendamos elaborar un documento de seguimiento posterior (una tabla de Excel, por ejemplo) en la que puedas apuntar el nombre de la empresa, persona de contacto, mail y teléfono, fecha del envío, fecha de la respuesta.
Eso te permitirá ir viendo quién ha contestado y quién no; y en función de ello, seguir contactando con esas empresas en días y semanas posteriores para obtener información más concreta; siempre dando un margen prudente de tiempo para no hostigar.